Moraiz entiende que ya no pertenece a aquel grupo del espectáculo, por lo que solamente en algún viaje a Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) visita a sus viejos colegas. O bien asiste a los eventos de inicio y cierre que hacen los circenses.

La vida lo terminó llevando a que su nombre termine siendo cartel de un emprendimiento gastronómico, titulado MC (Moraiz César). Dicha marca se convirtió en algo de lo más reconocido sobre La Rambla de Mar del Plata y, a su vez, se trasladó a la esquina de avenida Fortunato de la Plaza (ex 39) y Juramento.

"Si bien mi vida es el circo, porque me inicié ahí y aprendí cómo moverme en la vida, no puedo negar que la gastronomía me llevó a desarrollarme y enseñarme a hacer dinero", expresó en diálogo con NOVA el empresario de 50 años.

Y añadió: "Sin ir más lejos, con tan solo visualizar lo que fue la confitería París uno puede ver de qué soy capaz". El local es uno de los más visitados y reconocidos de La Rambla en Mar del Plata. Él fue quién lo abrió y le dió el nombre.

Sin embargo, no ha sido él único sector que lo tuvo como protagonista. Ya que, se animó a entrar el mundo de la política mediante el espacio justicialista de Lealtad y Dignidad (LyD). Ese mismo que lo intentó llevar, de manera fallida, al abogado Fernando Burlando como Presidente. ¿Casualidad de que ahora los vuelva a unir para el 2023?

En su trayectoria, estuvo junto a Alejandro Biondini en el Frente Patriota (FP), más por sus ideas leales a las líneas del difunto ex presidente Juan Domingo Perón. Ideología que comparte bastante el empresario gastronómico, amén de algunas visiones nacionalistas de complemento.

"Considero que el peronismo es una forma de hacer política que pone a las clases sociales en par. Pero también se debe entender que el movimiento falleció con Perón. Hoy solo han quedado las ideas", expresó en diálogo con NOVA. Y señaló: "Sin embargo, no hay que confundir las cosas. Porque hay quiénes se robaron las figuras y todo, pero no son parte de ello. El kirchnerismo jamás tendrá nada de peronista".

Ante todo lo referido, es propicio dejar en claro que Roberto César Moraiz ha cruzado varias aristas de su vida, una paralela a la otra. Es una especie de mezcla exótica que lo ha convertido en un personaje particular de la ciudad de Mar del Plata.