Top Cake acató la conciliación obligatoria, pero el escándalo no se apaga
Luego de una protesta pacífica frente al local de De Top Cake ubicado en Avellaneda y Jujuy, los trabajadores despedidos se retiraron del lugar tras dictarse la conciliación obligatoria por parte del Ministerio de Trabajo de la Provincia. La medida descomprimió el conflicto en la superficie, pero el horno sigue bien encendido: la firma aún no pagó ni un peso de indemnización a los siete empleados echados.
Desde UTHGRA Mar del Plata, el gremio liderado por Pablo Santín, denunciaron que la empresa intentó forzar un conflicto enviando a otros trabajadores a provocar a los manifestantes. “Una actitud cobarde y provocadora por parte de quienes no se hacen cargo de la gravedad de lo que hicieron: despedir sin pagar”, dispararon.
La situación legal es cada vez más oscura. La firma anterior, Royal Cake MDP SRL, acumuló más de 20 juicios laborales y una decena de causas con AFIP. Hoy operan con una nueva razón social, Bread Factory Pastry SA, que ya registra más de diez litigios laborales y al menos cinco expedientes tributarios activos.
El gremio anunció que evalúa avanzar con una denuncia penal tributaria contra Débora Tejeda y Gastón Castaño, los responsables de la empresa. “Todo indica que estamos frente a una maniobra fraudulenta para evadir responsabilidades, estafar al Estado y vulnerar derechos básicos”, dijeron desde UTHGRA.
El conflicto sigue abierto, y los trabajadores, firmes en su reclamo: quieren lo que les corresponde por derecho y no van a aflojar.
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