Más del 52,1 por ciento del empleo se encuentra no registrado en el Municipio de General Pueyrredón (MGP), o mal llamado "negro". Así lo midió una consultora privada de "La Feliz".
Esa misma gente que, en medio del frío, espera por el colectivo bajo la lluvia y el frío de agosto. O la que, con suerte, va en auto al trabajo.
Los referidos sufrimientos no son propios de los empleados municipales, los cuales hasta pueden darse el lujo de retener tareas, sin siquiera hacer peligrar sus puestos laborales. Ellos pueden, el vecino que paga sus salarios no.
Aún hay quejas por parte de la planta municipal por incrementar sus bolsillos, como si la recaudación del Municipio creciera del suelo o los árboles. En medio de todo, el contribuyente es presionado sin más.
También, el Gobierno local hace lo propio con una gestión sin presupuesto para Desarrollo Social, Salud o las entidades vecinales. Sí para la cultura y el espectáculo, como si ello hiciera que las panzas dejaran de sonar.
Los vecinos de Mar del Plata no encuentran consuelo entre los trabajadores municipales alérgicos del laburo y sedientos del bolsillo vecinal, mucho menos del Gobierno local que se guarda los salvavidas.
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