Sin más compañía que su Tata, una guitarra, un arado y algunos animalitos, el gaucho Mate Amargo se queja todo el tiempo de sus penurias.
Porque estoy yeno de piojos
Y el calor me está matando
Como alma vivo penando
A la sobra del ñandubay (1)
Por eso mesmo mi Tata
Quiero ser Echegaray
Ansío irme de viaje
Con la plata de la gente
Seré un tipo repelente (2)
Menos con Natalia Oreiro
Y con la guita choreada
Me iré a Río de Janeiro
Toy harto de la crotera (3)
Me voy pa Copacabana
Y a la c… de su hermana
Mandaré a los periodistas
Que lo único que sirven
Es para escribir macanas.
En una suite de lujo
De un gran hotel brasileño
Disfrutaré con empeño
La platita de la gente
Y si alguien me investiga
Yo me iré por la tangente
Si el periodismo se ensaña
Les mandaré patovicas
Pediré comidas ricas
Pues me gusta la lasaña
Y derramaré mi furia
Al que me baje la caña.
No se ponga triste, padre
Algún día he de volver
Y hasta invitaré a comer
A María Julia Alsogaray
Compréndame, viejo Tata
QUIERO SER ECHEGARAY
(Poema telúrico dedicado con amor a nuestro amigo Ricardo Echegaray, un hombre que derrocha honestidad –y dólares por doquier- como titular de la AFIP)
(1) Arbol llamado comúnmente algarrobillo, espinillo, ibopé-morotí, o ñandubay, es una especie leguminosa. Se halla en Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay.
(2) Soberbio, arrogante, sabelotodo.
(3) Malaria, vivir con lo justo, se usa comúnmente en las provincias del Norte Argentino.