Una de las tantas filtraciones hablaría de su actual pareja, Lucía Lourdes Turrión, quien habría sido obligada por él para llevar adelante un aborto. La joven ha quedado traumatizada por el hecho y, en consecuencia, Carrancio llegó a utilizar ello para poder darla de baja en la planta política del Concejo Deliberante.

Lo que resulta totalmente increíble es que su espacio se alinea indiscutiblemente a favor de los derechos del niño por nacer, aunque el edil actuó de forma distinta y se cargó con una vida. Amén de que, también, estaría ejerciendo hace años violencia psicológica hacia ella y, tras dejarla sin trabajo, no la acompaña en la búsqueda de uno nuevo.

Otra de las tantas filtraciones, expresaría su gusto por las relaciones extramatrimoniales, siempre con mujeres más jóvenes. Del mismo modo, utilizaría los partidos de fútbol con sus amigos en reiteradas ocasiones como “chivo expiatorio”. Este último tiempo, mantuvo una lesión que lo está dejando con mal caminar, por lo que puede justificarse con su pareja.

“Siempre que tiene malos resultados, días o peleas con su actual pareja, se descarga con destratos hacia el personal o equipo. Es un mal tipo Carrancio y no entiende que debe cuidar a los suyos”, expresan desde cerca de su círculo. Y añaden: “a veces, te manda al ‘Vikingo’ para que te apriete laboralmente”.

Algunas fuentes oficiales, enmarcan que el funcionario que ya no forma parte de la masa amalgamada del oficialismo es una fuente de oro para los medios de comunicación. Ya que, no es una persona pulcra y su forma de ser se encargaría de dejar muchos heridos dando vueltas en los pasillos del Palacio Municipal.