Hay debate nacional, pero en la ciudad no: ninguno quiere exponerse
Las elecciones en Mar del Plata vienen intensas con un oficialismo partido y dos oposiciones sin ganas de realizar pasos en falso. Un claro ejemplo es el caso del libertario Rolando Demaio, el cual apuesta con todo a la tracción local del fenómeno de Javier Milei.
El líder de La Libertad Avanza (LLA) ganó en la ciudad de Mar del Plata, mientras quedó segundo en la Quinta Sección bonaerense. Acorde a ello, se estima que hay un aglomerado de votantes que podrían ofrecerle la victoria al espacio libertario. Solo tendrían que administrar la victoria.
Por la parte de la directora ejecutiva de la Administración Nacional de Seguridad Social (ANSeS), no hay mucho para decir. No quiere hablar con la prensa y se minimiza a charlar con sus militantes. Ofrecer propuestas. A medida que su imagen crece exponencialmente.
Ahira bien, en el Frente de Izquierda y de los Trabajadores - Unidad (FIT- U), con Rosa Mauregui solamente hay batallas contra el sector de Juntos por el Cambio (JxC). Haciéndole perder votantes por siniestra al intendente Guillermo Montenegro.
El jefe comunal atiende a la prensa, pero no ofrece muchas explicaciones. Busca batallar contra Demaio en lo que son las temáticas de seguridad y economía. Más bien, quiere ponerse en línea con aquellos sectores más liberales. Idear que la mejor opción de Milei es él. Y nadie más.
Montenegro está enfrentado con Patricia Bullrich, su candidata a Presidente, debido a su juego consecuente con el jefe de Gobierno porteño en las PASO, Horacio Rodríguez Larreta.
A todo ello, se le suma que el intendente de Mar del Plata está tomado de los pelos con que no logra unir a los ejes de campaña. Mientras su jefe, el senador bonaerense Alejandro Rabinovich, mantiene todo enfilado al 22 de octubre, Gustavo "Tato" Serebrinsky, desde el sector radical, hace de las suyas. ¿Y Emiliano Giri? algunos lo ubican cerca del candidato de LLA en la Legislatura provincial, Alejandro Carrancio.
