De hecho, el líder de esa fuerza política, Sergio Massa, recibió información a lo largo de todo el día sobre las decisiones de los dos ediles –quienes se diferenciaron de Cristian Azcona, del mismo bloque– y por la tarde “explotó de bronca”, aseguró una fuente.

“Los legisladores de la quinta y la conducción del Frente Renovador rechazaron enérgicamente el tarifazo de Carlos Arroyo. Desde Facundo Moyano hasta Pampin, pasando por Faroni y Curuchet y estos muchachos se cortaron solos”, se indicó.

Los voceros del líder renovador fueron aún más allá y admitieron que se iniciarán investigaciones puesto que “hay sospechas de que Fiorini cambió su apoyo por designaciones”.

“Van a hacer la lista de militantes de su agrupación y la van a cruzar los próximos cuatro meses contra la base del Instituto de Provisión Social. Si aparece en la provincial o el municipio un solo empleado se le hará una denuncia penal”, avisaron desde Tigre.

De hecho, no se descarta expulsar del partido tanto a Fiorini como a Carrancio, se indicó. No obstante, en las últimas semanas Fiorini ya se había mostrado muy cercano al arroyismo a partir de su relación con el ministro de Gobierno de la Provincia, Joaquín de la Torre, enviado especialmente por la gobernadora para ayudar al intendente en su gestión.

Su “debut” acompañando en el oficialismo se registró en la aprobación del nuevo Código de Publicidad.

Cabe destacar que sin los votos de Fiorini y Carrancio, el oficialismo no hubiese podido aumentar el boleto ya que el concejal radical y presidente de la UCR, Mario Rodríguez, votó en contra. El aumento tuvo 12 votos a favor y 11 en contra, y la abstención de Azcona.