“Hemos tenido que reconvertir nuestra actividad a la virtualidad, como todo el mundo y nos propusimos trabajar todos los días para generar material de calidad que sea útil como contenido educativo, porque además de atender las demandas puntuales de los colegios, por ejemplo, buscamos que ese contenido se pueda potenciar, que se use en otros cursos. Y nos está dando muy buenos resultados”, explicó Pujol.

Partiendo del calendario ambiental como instrumento para instalar temáticas, se han realizado en los últimos meses varios encuentros abiertos a la comunidad, de los que participaron más de 200 personas, así como charlas en cursos de colegios primarios y secundarios que permiten la participación de 60 estudiantes por vez.

Muchas de esas intervenciones se grabaron y están disponibles en el canal de Youtube del Museo, de manera que pueda ser utilizado por otros docentes que deseen abordar las mismas temáticas en sus clases, lo que incrementa exponencialmente la cantidad de visitas y la difusión de la propuesta.