La joven de 28 años, Elizabeth Melo, incursiona en el mundo del modelaje y nos detalla su amor por la profesión y revela un dato no menor para el público masculino.
En diálogo con NOVA, nos cuenta sus comienzos: “Mi carrera en modelaje comenzó por el año 2011, cuando a su vez, inicié mi carrera universitaria. Sentía la necesidad de poder explorar y reconocerme en otra faceta, redescubriendo aspectos y dimensiones que tenía totalmente reprimidas. Hay que destacar que en el 2011, yo tenía 18 años, y a lo largo de mi vida solo me había dedicado a estudiar, ya que siempre sentí pasión por leer y aprender nuevas cosas, pero me sentía apagada. Así fue que comencé a asistir a castings, scoutings, y empecé a ser seleccionada. Igual no me fue fácil”. A su vez, prosiguió: “Mi baja altura (mido 1.57 cm), el no ser tan flaca, y demás cuestiones de mi físico, provocaban que los directores de agencias nunca me elijan, pero de a poco lo fui logrando”.
Siguiendo con sus primeras incursiones en la moda, Elizabeth confesó: “Poder iniciar mi profesión de modelo me permitió reconocerme de otra manera, a desafiarme e incluso cambiar la percepción que tenia de mi persona. Pero no es todo color de rosas, no es un ambiente para nada fácil. Siempre me han juzgado por mi baja altura, por la forma de vestir e incluso de ser, y no te voy a mentir, en un principio me afectaba, queriendo largar todo. La vida luego, me demostró que hay personas humanas en este ambiente, y el proceso de deconstrucción de estereotipos que estamos viviendo también de alguna manera logró una transformación en la constante descalificación que ya estaba naturalizada en este ámbito”.
A su vez, remarcó la importancia de las redes sociales para mostrar y difundir lo que quería realizar: “Lo que realmente a mí me ayudó a desempeñar mi profesión fueron las redes. En su momento Facebook y luego Instagram, que me abrió puertas que jamás pensé que iban a abrirse. Conectar con 120 mil personas no estaba ni en mis sueños, ser entrevistada por diarios y revistas nacionales mucho menos. Y gracias a eso pude empezar a trabajar con marcas, participar en desfiles y hasta incluso organizar mi propio desfile”, cerró.
En una nota que se puso realmente interesante, nos contó algo muy importante en cualquier profesión, que es remarcar sus logros: “Acá en Mar del Plata fui Reina de una de las fiestas más importantes que tiene la ciudad. Luego, como modelo desfilé en excelentes lugares de la ciudad, para grandes marcas y diseñadores. Poder ser entrevistada en diarios, radio y televisión también, cumplí el sueño y aun lo sigo cumpliendo. Haber sido profesora de pasarela y preparar a las chicas para postularse a diversas fiestas populares, también, nada más lindo que poder transmitir el propio conocimiento y experiencia”.
Por último, y tal vez la pregunta más esperada por todo el público masculino marplatense: ¿Estás soltera, Eli?: “Actualmente estoy soltera, antes eso me preocupaba mucho. Veía que pasaban los años, mis amigas en pareja, y yo todavía sola. Confieso que me hablan muchas personas no es fácil para mi poder estar con alguien, soy terriblemente selectiva. Hoy en día en las relaciones impera la licuefacción del vínculo, la liviandad, la falta de compromiso que me exaspera. ¿Sabes que odio? El “estoy y mañana no estoy”, “no te prometo nada”, “hay que aprender a soltar”, “no sé si hoy en día quiero estar con alguien”, y esa histeria, esa indecisión, esa poca solidez del ser, yo no la necesito para mi vida”, manifestó.
