Fuga de un preso en Batán desnuda la desidia del Servicio Penitenciario
La fuga de un violador del complejo penitenciario de Batán que se encontraba cumpliendo funciones en el programa “Casas por Cárceles”, puso en evidencia los problemas de seguridad y riesgos de fuga que implican este tipo de iniciativas, generando además preocupación en la población.
Leandro González cumplía una condena de 16 años por violación cuando se escapó aprovechando la falta de controles y la ausencia de personal penitenciario en el marco de las tareas que desarrollan los detenidos que forman parte del mencionado programa.
Si bien el reo fue recapturado apenas unas horas después, los vecinos del complejo carcelario de Batán pusieron el grito en el cielo y aseguraron a esta agencia que “es común ver presos sin custodia afuera de la zona en la que deberían estar”.
“Por esta zona hay gente de laburo, pasan mujeres todo el tiempo y ahora nos enteramos que un violador andaba sin custodia, a tal punto que se pudo escapar”, se quejaron los habitantes del lugar, quienes pidieron estricta reserva de identidad por temor a represalias por parte de las autoridades penitenciarias.
El complejo está a cargo de Omar Herrera, oficial superior que ya fue denunciado en varias oportunidades, pero que según fuentes internas del SPB, está esperando el último ascenso para retirarse, motivo por el cual la intervención que encabeza Fernando Rozas tampoco acciona en su contra.
En el video que acompaña esta nota, que fue registrado por un vecino con un teléfono celular, se puede ver como un interno del complejo carcelario se encuentra realizando tareas de jardinería en una zona alejada del sector de seguridad y sin la mínima custodia. “Esto es cosa de todos los días, es imposible vivir sin miedo”, remarcaron.
Mientras tanto, la gobernadora María Eugenia Vidal sigue promocionando los cambios en el Servicio Penitenciario como si estuvieran resultando efectivos, aunque este nuevo episodio deja en claro que ninguno se dio en profundidad.
