River Plate derrotó a Boca Juniors por 2-0 en el Superclásico de la ciudad de Mar del Plata, con los goles de Sebastián Driussi y Arturo Mina, tras una etapa para cada equipo y con situaciones en ambos arcos, con mucha polémica y con una gresca generalizada.
En el inicio del partido, donde se arrancó con mucha pierna fuerte y varias exageraciones, dejaron en claro que los 22 jugadores no iban a permanecer durante todo el partido. Con el paso de los minutos los dos dejaron de lado la pelea y comenzaron a generar situaciones.
La primera ocasión fue para Cristian Pavón donde salvó Augusto Batalla. River tuvo la réplica por medio de Driussi y rápidamente Ricardo Centurión. Pero la más clara le perteneció a los “Millonarios” por un cabezazo de Rodrigo Mora que desvió bien Axel Werner, de menor a mayor.
Antes que culmine la primera etapa, el DT del “Xeneize”, Guillermo Barros Schelotto, se fue a los vestuarios por exceso verbal, con muchas protestas desmedidas hacia el árbitro Néstor Pitana, de flojo desempeño. Luego, Marcelo Gallardo corrió la misma suerte.
Ya en el segundo tiempo, River arrancó mejor parado y con una situación de Ignacio Fernández avisó. A los 17 minutos, llegó la apertura del marcador luego de que Gino Peruzzi saliera mal, Juan Insaurralde hizo penal y cambió Driussi por gol.
En busca del empate, Boca lo tuvo en los pies de Centurión, pero malogró. A los pocos minutos, el elenco de Núñez sentenció el tanteador con un cabezazo de Mina, luego de un córner.
Cerca del final, y con las revoluciones exaltadas, los incidentes y las expulsiones se hicieron presentes. Boca quedó con nueve por las rojas de Insaurralde y Darío Benedetto, mientras que River perdió a Driussi.
De esta forma, el Superclásico, el único que jugarán en este verano 2017, quedó en manos de los de “La Banda”, y ambos conjuntos seguirán con los trabajos de pretemporada.
